Las pataletas son un tema que generan gran preocupación en los padres y su manejo se convierte en un desafío.
Para abordar este tema, es fundamental comprender que las pataletas son una fase normal del desarrollo emocional de los niños y no deben interpretarse como una señal de mala crianza o falta de disciplina.
Durante esta etapa, los niños están aprendiendo a manejar y expresar sus emociones de forma adecuada, lo cual puede resultar agobiante para ellos.
Las pataletas, también llamadas rabietas, son episodios en los que los niños expresan de manera intensa y descontrolada sus emociones.
Estos momentos pueden ser estresantes tanto para los pequeños como para los padres o cuidadores, ya que a menudo incluyen llanto, gritos, patadas y otros comportamientos disruptivos.
Las pataletas en la infancia son habituales durante la etapa preescolar, siendo comunes hasta los 4 o 5 años. Forman parte del desarrollo del niño y son necesarias para que puedan tolerar la frustración y expresar y canalizar las emociones negativas.
¿Alguna vez te has preguntado por qué los niños hacen pataletas?
Los niños hacen pataletas principalmente porque están aprendiendo a manejar y expresar sus emociones de forma adecuada.
Durante la primera etapa de su infancia, experimentan una variedad de emociones intensas como frustración, rabia, tristeza o impotencia, y como aún no han desarrollado las habilidades emocionales y de comunicación necesarias para expresar y manejar estas emociones de forma positiva lo expresan con este tipo de comportamientos.
Frecuentemente, observamos a los niños manifestando su descontento de forma intensa y desafiante, sin embargo, es importante entender que detrás de estas reacciones emocionales hay múltiples causas subyacentes, por ejemplo:
- Cansancio y agotamiento.
- Necesidad básica no cubierta, por ejemplo, tener hambre o sueño.
- Falta en el desarrollo del lenguaje que le impide expresar lo que piensa.
- Estrategias para pedir y conseguir cosas cuando no las puede realizar por sí mismo.
- Producto de la frustración y bajo autocontrol de sentimientos y reacciones.
- Falta de autonomía.
Además, las pataletas pueden ser utilizadas por los niños como una manera de llamar la atención o buscar una respuesta por parte de los adultos.
Los niños pueden darse cuenta de que mediante estas reacciones emocionales intensas logran captar la atención y obtener una respuesta de los adultos, ya sea en forma de consuelo, comprensión o acuerdos.
¿Qué puedes hacer en el caso de una pataleta?
Cuando nos encontramos frente a una pataleta infantil, es fundamental contar con estrategias adecuadas para abordar la situación de manera efectiva. Estos tips pueden ser de gran ayuda:
- Mantén la calma es fundamental, los niños pueden percibir las emociones de los padres y reaccionar en consecuencia. Así que debes evitar dejarte llevar por la rabia o frustración y respirar profundamente para lograr tranquilidad.
- Mantenlo seguro, alejado de objetos que lo pueden lastimar y ocasionar heridas.
- Dale al niño tiempo y espacio para que se calme, mantén el contacto visual y físico.
- Dale un abrazo o acariciarlo le brinda seguridad y le ayuda a calmarse.
- Intenta distraerlo para desviar su atención en la causa de la pataleta, por ejemplo, háblale de otro tema o muéstrale un juguete de su gusto.
- Háblale de manera serena y pausada para transmitirle paz.
- Ayúdale a comprender sus emociones y a validar sus sentimientos.
- Promueve negociaciones, enséñale al niño o niña a buscar alternativas y a resolver conflictos a través del diálogo.
- Enséñale habilidades de autorregulación emocional una vez esté tranquilo, como técnicas de respiración profunda, el conteo hasta diez o hablar sobre sus sentimientos son de gran ayuda.
¿Qué debes evitar hacer en el caso de una pataleta?
Cuando nos enfrentamos a una pataleta infantil, es importante recordar que ciertas acciones pueden empeorar la situación y no contribuir a resolverla de manera adecuada, por ejemplo:
- Por ningún motivo recurras a los gritos o al maltrato físico, mantener la paciencia y la calma es esencial.
- No juzgues, etiquetes o compares a tu niña o niño.
- No ceder a sus peticiones. Decir “no” es también un gesto de amor. Mantén tus límites y sé firme en tus decisiones.
- No dar excesivas explicaciones que no se necesitan.
- Nunca ridiculices sus emociones o su enfado, ya que estas acciones son perjudiciales para el bienestar emocional del niño y no ayudarán a resolver el problema subyacente.
¿Cómo puedes evitar las pataletas?
No siempre es factible evitar las pataletas, pero al poner en práctica estrategias efectivas, puedes ayudar a prevenirlas y disminuir su frecuencia.
Hacer un seguimiento de las pataletas es muy útil para detectar los factores desencadenantes y poder modificarlos o eliminarlos. Las siguientes pautas son de gran ayuda:
- Establece horarios regulares para las comidas, las siestas, juego y otras rutinas diarias hace que los niños se sientan más tranquilos y seguros.
- Asegurarse de que el niño duerma la cantidad adecuada de horas según su edad.
- Mantén un equilibrio entre decir «no» y «sí», evitando extremos que puedan favorecer las pataletas.
- Comunícate con tu hijo de una manera clara, con un lenguaje sencillo, de esta manera él podrá expresar sus deseos y sentimientos de una forma más efectiva.
- Fomenta el juego y la actividad física ayuda a liberar energía, tensiones y a entretenerse.
- Permite que el niño tenga cierto grado de control, brindándole opciones o alternativas apropiadas para su edad, de esta manera siente que puede tomar decisiones por sí mismo.
- Ayuda al niño a manejar la frustración, comprendiéndolo, escuchándolo y enseñándole a expresar su enfado a través de palabras o desviando su atención hacia algo más interesante.
Mi opinión como pediatra integrativa
Con paciencia, comprensión y amor, estarás más capacitado para manejar con las pataletas de tu hijo de manera efectiva.
Recuerda que cada niño es único y las estrategias de manejo pueden dar resultados variables.
Si las pataletas persisten o se vuelven especialmente difíciles de manejar, es recomendable buscar el asesoramiento de un pediatra integrativo buscando un enfoque de manejo personalizado y adecuado a la situación específica.
En el abordaje de las pataletas desde una perspectiva holística, se considera el bienestar físico, emocional y mental de los niños.
Se debe tener en cuenta en primer lugar una dieta saludable, evitando el consumo de azúcar refinada y alimentos procesados que pueden alterar el estado de ánimo.
Es necesario estimular la actividad física y establecer una rutina de sueño, algunas técnicas de relajación y mindfulness, pueden ayudarlo a manejar el estrés y las emociones de manera más efectiva.
Las terapias complementarias pueden ser beneficiosas para el manejo de las pataletas, algunas de ellas son la, homeopatía, aromaterapia, esencias florales, musicoterapia, entre otras.
Excelente. Acompañar a los niños y niñas en estos momentos de pataleta o rabieta permite que puedan controlar mejor sus emociones, cuando se dejan solos el proceso es más difícil y esto se evidencia mayormente en el inicio del proceso escolar.
Gracias por tu comentario Diana, espero que este blog sea de utilidad para muchos papitos. Un abrazo.